
Alberto Barnada, de 77 años y conocido como “Bombita”, fue condenado por transportar ilegalmente 500 kilos de dinamita en su camioneta. El hecho ocurrió hace más de un año, y esta semana el Tribunal Oral Federal de Paraná lo sentenció a tres años de prisión condicional.
El hombre había salido de Córdoba con rumbo a Misiones cuando fue detectado por la policía en un control cercano al Túnel Subfluvial, en Entre Ríos. Durante la inspección, Barnada mostró nerviosismo y aseguró que llevaba agroquímicos, pero los agentes descubrieron 15 panes de explosivos cubiertos con trapos y sin la documentación correspondiente. La carga totalizaba 500 kilos de Gelamón V.F. 65%, una dinamita de alto poder fabricada por Fabricaciones Militares en Villa María, utilizada en minería y construcción.
La defensa intentó restarle importancia al caso, argumentando que la falta de detonadores hacía al material “inofensivo”. Sin embargo, los especialistas en explosivos destacaron que la camioneta no contaba con las medidas de seguridad necesarias para transportar semejante carga, lo que representaba un riesgo grave.
La fiscalía había pedido cuatro años de prisión efectiva, señalando que Barnada, como comerciante de equipos viales y mineros, era consciente del peligro. Además, se remarcó que la noche anterior el hombre había dejado la camioneta con la dinamita estacionada en una estación de servicio, aumentando el riesgo para la población.
Durante el juicio, el propio acusado admitió que no tenía autorización ni cumplía con la normativa para el transporte de explosivos. La jueza federal Noemí Berros decidió aplicarle una pena de prisión condicional, inferior a la solicitada por la fiscalía, pero reconociendo la peligrosidad de los hechos. La Justicia también ordenó la destrucción de la dinamita incautada.