Aldosivi firmó una de las remontadas más impactantes del torneo en el José María Minella y terminó sellando un 4-2 que envió a San Martín de San Juan a la Segunda División. Lo que empezó como una tarde adversa para el equipo marplatense terminó convertido en un ejercicio de supervivencia pura, con un cierre eléctrico y repleto de decisiones revisadas por el VAR.
El Santo había golpeado primero a los 21 minutos del complemento, cuando Santiago Barrera capitalizó una jugada revisada milimétricamente y vulneró a Carranza. El 1-0 acomodaba a los sanjuaninos en el mapa de la permanencia y parecía enfriar la tarde en Mar del Plata.
Pero el Tiburón reaccionó con una voracidad inesperada: en apenas dos minutos desarmó el partido y torció el destino. Moya apareció para empujar el empate tras un envío al área que complicó a la defensa visitante, y enseguida Rami aprovechó un pelotazo largo para definir con frialdad el 2-1. El Minella pasó de la angustia a la euforia en un instante.
San Martín intentó sostenerse, pero el duelo se transformó en un ida y vuelta desenfrenado. Aldosivi, decidido a no soltar su lugar en la élite, encontró el golpe final en tiempo añadido: un penal sobre Preciado, ratificado por el VAR, que el propio ecuatoriano cambió por gol con un remate bajo y preciso para el 4-2 definitivo.
El cierre fue un contraste absoluto: celebración desbordada en las tribunas y un banco visitante hundido por la confirmación de su descenso. Aldosivi se queda en Primera; San Martín, tras un final cargado de tensión, vuelve a la categoría inferior. Una tarde que quedará marcada por la montaña rusa emocional y un resultado que lo cambió todo.
