
A casi un mes de la condena contra Marcela Acuña por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, la jueza de la Cámara del Crimen N.º 2 de Chaco, Dolly Fernández, dispuso el fin de los privilegios que la dirigente había mantenido durante el juicio oral. La resolución, comunicada este sábado, ordena que la condenada pase a un régimen de detención común, en igualdad de condiciones con el resto de las internas.
Hasta ahora, Acuña accedía a espacios y actividades que no estaban disponibles para todas las personas condenadas, luego de haber sido trasladada a un pabellón común. En su decisión, la jueza instruyó al Servicio Penitenciario a garantizar condiciones de seguridad y un trato digno, aunque remarcó que el habeas corpus correctivo no puede utilizarse para otorgar beneficios especiales.
La magistrada ya había intervenido en la fase previa del debate, donde se establecieron las responsabilidades penales por el crimen ocurrido en junio de 2023. Todavía falta definir las penas concretas para los seis condenados del clan Sena y su círculo cercano, decisión que podría demorarse por la feria judicial de fin de año. El plazo formal para dictar sentencia es de quince días hábiles desde el cierre de las audiencias de cesura, ocurrido el 28 de noviembre.
Durante el proceso de alegatos finales, César Sena —considerado autor material del femicidio— pidió no ser trasladado fuera de Resistencia, al igual que su padre Emerenciano, quien alegó razones médicas y familiares. Acuña, por su parte, cuestionó el veredicto del jurado popular y afirmó que su esposo fue condenado sin pruebas firmes. Los otros tres condenados por encubrimiento —Gustavo Obregón, Fabiana González y Gustavo Melgarejo— solicitaron la posibilidad de volver con sus familias.
La fecha de lectura de la sentencia final se notificará a través del sistema SIGI, aunque por el momento no hay confirmación oficial sobre si los plazos serán suspendidos durante el receso judicial.