
El “Súper River” de Marcelo Gallardo sufrió un duro golpe: quedó eliminado de la Copa Argentina a manos de Independiente Rivadavia de Mendoza, que se impuso 4-3 en la definición por penales después de un empate sin goles en el tiempo reglamentario.
La Lepra mendocina hizo historia. Sebastián Villa convirtió el penal decisivo y selló la clasificación del conjunto cuyano a su primera final en este certamen, donde enfrentará a Argentinos Juniors. Uno de los dos se quedará con el título y el pase a la Copa Libertadores 2026.
Para el Millonario, la caída tiene un sabor especialmente amargo. El torneo era una de las últimas oportunidades concretas para asegurar su participación en la próxima Libertadores. Sin esta vía, River deberá enfocarse en el Torneo Clausura: necesita terminar en el segundo o tercer lugar de la Tabla Anual (Rosario Central ya tiene el primer puesto asegurado) o consagrarse campeón para lograr el objetivo continental.
El panorama inmediato no es sencillo. El conjunto de Núñez se ubica quinto en la Zona B del Clausura y aún no tiene garantizado su pase a los playoff. En el horizonte aparece un calendario exigente, con el Superclásico ante Boca Juniors en la Bombonera por la fecha 15, además de los duelos ante Gimnasia en el Monumental y Vélez en Liniers para cerrar la fase inicial.
La eliminación deja a River sin margen de error en un cierre de año cargado de presión, donde la clasificación internacional y la continuidad del ciclo Gallardo podrían quedar bajo la lupa.