
La comunidad de La Banda, en Santiago del Estero, quedó conmocionada tras un grave episodio de violencia familiar ocurrido el pasado lunes por la tarde en el barrio Constitución. Una docente de matemática y comerciante fue agredida físicamente por su hija de 20 años luego de que le reclamara que buscara un empleo para hacerse cargo de sus gastos personales.
El caso está siendo investigado por la fiscal María del Pilar Gallo y generó gran preocupación en el ámbito educativo y vecinal.
El hecho salió a la luz poco antes de las 17 horas, cuando la víctima llegó alterada a la Comisaría Nº 2 de la Mujer y la Familia, donde denunció lo sucedido y pidió protección policial.
Según relató la mujer, la agresión ocurrió tras una discusión doméstica en el domicilio que ambas comparten en la Manzana 28 del barrio Constitución.
De acuerdo con la denuncia, la confrontación comenzó cuando la madre le solicitó a su hija —identificada como S. C.— que consiguiera un empleo formal para contribuir a los gastos del hogar. La joven reaccionó de forma agresiva, elevando el tono de voz y adoptando una actitud violenta.
El relato policial señala que la violencia estalló de manera repentina. La profesora contó que su hija tomó un objeto sin identificar y la apuñaló en el pecho, causando una herida en el lado izquierdo. Luego, la golpeó con una bofetada en el ojo y le propinó una patada en el abdomen. Por el impacto, la mujer perdió el equilibrio, cayó sobre la cama y se golpeó la cabeza contra el suelo, quedando inconsciente por algunos minutos.
Al recuperar el conocimiento, notó que su hija no estaba en la casa y decidió dirigirse a la comisaría para pedir ayuda y formalizar la denuncia. La policía activó el protocolo correspondiente y acompañó a la víctima a un centro de salud para evaluar sus lesiones.
Dada la gravedad del ataque y los primeros informes médicos, la fiscal Gallo solicitó al Juzgado de Control y Garantías la detención de la joven agresora. Al cierre de esta nota, se desconocía el paradero de S. C.
La investigación judicial busca esclarecer todos los detalles del incidente, la tipificación legal de las lesiones y el impacto psicosocial en la víctima. Además, se están evaluando medidas de protección y acompañamiento psicológico para la profesora, que permanece bajo seguimiento médico e institucional.
Mientras tanto, la orden de detención contra la agresora sigue vigente y la causa avanza con la recopilación de pruebas médicas, testimonios y otros elementos que permitan establecer responsabilidades y antecedentes familiares. La joven podría enfrentar cargos por lesiones y violencia intrafamiliar, aunque la calificación definitiva dependerá del desarrollo de la investigación y pericias.
La docente continúa recibiendo atención médica y apoyo psicológico para afrontar las secuelas físicas y emocionales derivadas de la agresión.